Las cosas se acaban cuando nosotros decimos
basta. No cuando los demás lo deciden por nosotros. Si no queremos
seguir intentando, nadie nos puede decir que no, nadie nos puede negar
una segunda, tercera, incluso séptima oportunidad. Incluso en el amor se
puede seguir intentando.
Y aunque fallemos siempre va haber una
oportunidad para intentarlo otra vez.